«Mi mente es como una presentación de diapositivas, una secuencia de flashes de todas las veces que he soñado despierta, que he deseado y he suspirado por tener la oportunidad de daros esta noticia», así empezaba Taylor Swift el anuncio de que, por fin, toda la música que había hecho le pertenecía.

Una noticia muy esperada por sus fans, que sabían que la cantante llevaba desde 2019 luchando por recuperar los derechos de sus primeros seis discos. Estos habían sido vendidos al productor Scooter Braun, motivo por el cual Swift inició un largo proceso de regrabación de esos álbumes que, durante años, dio prácticamente por perdidos.

La celebración era evidente, y así se ha reflejado con un pico notable en las escuchas de sus discos en Spotify durante los días posteriores al anuncio. Según datos a los que ha tenido acceso ‘The Howllywood Reporter’, únicamente el álbum ‘Speak Now’ (2010) ya tuvo un incremento de ‘streams’ del 430% en todo el mundo con respecto al número medio de reproducciones diarias que registraron entre el 1 de abril y el 29 de mayo.

En el caso de su álbum debut, que lleva su nombre como título, y ‘Reputation’ (2017), los dos únicos discos que no ha vuelto a grabar, las escuchas aumentaron un 220% y un 175%, respectivamente. Por su parte, los ‘streams’ de ‘Fearless’ (2008) crecieron un 160%, los de ‘Red’ (2012) un 150% y los de ‘1989’ (2014) un 110%.

Las reproducciones de la cantante, que cuenta con 82 millones de oyentes mensuales en la plataforma (es la décima artista más escuchada del mundo), aumentaron en general un 40% solo el viernes, día del anuncio.