Tal y como se esperaba, Taylor Swift se ha convertido esta madrugada en la artista más destacada de la 66 edición de los Premios Grammy al recoger su cuarto galardón a mejor álbum del año, en esta ocasión por Midnights. Un galardón que la erige en la artista con más distinciones de la historia en esta categoría.

El hito, muy celebrado por los millones de fans que Swift atrae en el mundo, se ha visto, no obstante, algo empañado por lo que muchos usuarios han considerado un feo gesto de la cantante a la hora de recoger el premio.

La artista encargada de entregárselo ha sido Céline Dion, que ha aparecido por sorpresa en la gala tras dos años alejada de los escenarios por una enfermedad neurológica.

Algunos fans consideran que, en el momento de la concesión, Swift no prestó la suficiente atención que merece un peso pesado de la industria como Céline Dion. «¡Horrible! ¡Ni siquiera reconoció a Céline Dion! Todo el mundo sabe cómo la salud de Céline se ha ido deteriorando sin pronóstico de recuperación» o «Taylor Swift ignorando completamente a Céline Dion como si fuera una presentadora modelo de trofeos» fueron algunos de los mensajes compartidos en la red social X (antes Twitter) por algunos usuarios.